domingo, 30 de diciembre de 2012

En coche bajo el mar, mis abuelos en el crepúsculo y viaje a Canadá (finales diciembre 2012)

1 coche submarino Voy en coche con mis amigos Jose y Javi. Atravesamos una zona marítima o pantanosa. De repente, nuestro vehículo queda completamente inundado, como si nos hubiéramos metido en el fondo del mar por algún conducto. Aguantamos la respiración, entre acongojados y excitados por la sensación de aventura.

2 abuelos al atardecer Cuido de mis abuelos Cristino y Cari, acompañándolos por el centro de una vieja ciudad. Estamos esperando que llegue alguien. Mientras tanto, ellos se quedan sentados en un banco, en una zona alta donde se obtienen vistas de la ciudad cuando ya está cayendo la tarde. Viendo a mi abuela, caigo en la cuenta de que murió, para después revivir extrañamente. La melancolía lo invade todo.

3 quebec monumental Emprendemos un viaje a una ciudad monumental de Canadá, acaso del Quebec. Somos un grupo amplio, de unas 20 personas o más. Primero recorremos unos grandes almacenes industriales. Siento claustrofobia, no sé si podremos salir de allí. Finalmente salimos al exterior y en unos de los recodos del camino se otea en la lejanía una bella iglesia o catedral barroca, de estilo centroeuropeo, con torres de remates agudos, verdes y bulbosos. Aprovechando un ángulo propicio, empiezo a hacer un sinfín de fotos, mientras mi madre, junto a Lilí, amiga de la familia, nos advierte que debemos seguir todos un mismo camino o el viaje será un caos.

jueves, 13 de diciembre de 2012

Llego tarde a gimnasia, bronca con mi madre (principios diciembre 2012)

Estoy en casa de mis padres, vistiéndome a toda prisa para ir al instituto. Al parecer, aún tengo pendientes algunas asignaturas en el centro de secundaria, y, en este caso, debo asistir a clase de gimnasia. Acelerado, busco mis zapatillas deportivas blancas. Mi madre me riñe con gritos por llegar tarde. También está muy nerviosa puesto que voy a participar en una huelga (?) (hablando con alguien, admite que tiene miedo y está preocupada).

domingo, 9 de diciembre de 2012

Último y frustrante día de viaje (principios diciembre 2012)

Sueño muy recurrente las últimas semanas. Es el último día de viaje en una gran ciudad monumental e intento apurarlo al máximo, recorriendo sus calles y buscando los recorridos principales que ya he trazado previamente. Sin embargo, no consigo nunca llegar a los lugares deseados, y, por otra parte, me invade la tristeza y el sinsentido al pensar que en pocas horas ya estará de vuelta a casa.

Miedo en el submarino (principios diciembre 2012)

Me hallo junto a otras personas en el interior de un amplísimo submarino que nos permitirá ver todo tipo de peces, tiburones y ballenas a través de los cristales, cual un gran acuario circundante. Sin embargo, el trayecto es tenso y desagradable. A veces se ve el exterior, en vez de las profundidades marinas, como si el aparato avanzase a trompicones. Veo algun pez esporádico (muy grande, del tamaño de una ballena o un cachalote), y temo constantemente que la presión acabe reventando el submarino.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Viajo en el tiempo y veo a mis hermanos de bebés (principios diciembre 2012)

Consigo viajar en el tiempo y veo a mis hermanos pequeños Lluís y Alícia (gemelos) cuando tenían apenas un año. Me enternece recordarlos así, les palpo las mejillas.

Viajo solo a la montaña y no sé cómo volver; cuido a mi sobrino a la intemperie (finales noviembre 2012)

1 perdido en la montaña Hago una excursión solitaria a un pueblo del Pirineo. Llego hasta allí en coche. Recorro caminos cercados de bosques y masías. Me fijo en plantas aromáticas. Hablo de lejos con el dueño de una finca. Me siento libre pero invadido de melancolía. Cuando debo regresar a casa, no encuentro mi coche y además caigo en la cuenta de que no sé conducir. Pienso en llamar a Laura, no sé qué hacer. Voy atravesando pasos estrechos, desconcertado.

2 padre precario Cuido de mi sobrino Pau en una especie de cabaña o módulo al aire libre, enfrente de una oficina bancaria. Debo hacer algunas visitas a la oficina, pero me preocupa dejarlo solo. Lo llevo en brazos en algunas de mis visitas.