sábado, 9 de mayo de 2009

La casa del terror, la serpiente marina y disparando con la entrepierna (8-9 mayo 2009)


1 Entramos en procesión a una casa de los horrores. En cada pasillo, cada recoveco, nos aguarda un peligro o un espanto. Decido salir por la ventana y huir al vuelo. Luego me acompaña mi padre. Cuando llegamos a la reja de la entrada debemos volar más arriba, porque unos guardianes endemoniados nos intentan retener.

2 Veo la playa desde una zona elevada. Se están bañando algunos de mis familiares, quizá mi hermana Cristina. De repente empiezo a ver enormes peces surcando las aguas bajo la superficie: ballenas, tiburones. Y tras ellos aparece la silueta de una enorme serpiente marina, gruesa y amarillenta como una columna salomónica. Advierto a los bañistas, pero dicen que ya la han visto y no les importa.

3 Se oyen tiroteos y reyertas. Voy corriendo con un amigo a ver qué pasa. Llegamos a una esquina para espiar, y nos unimos a una chica que también está presenciando los acontecimientos. A lo lejos vemos dos grupos de hombres enfrentados, increpándose. De repente, uno de los grupos es tremendamente ametrallado y todos caen muertos. Nos asustamos, preguntando de dónde habrán salido los tiros. Entonces la muchacha nos hace saber que ha sido ella: ha disparado con su sexo como proyectil. Dice que ya lo ha hecho otras veces, pero promete que a la próxima avisará para no sobresaltarnos.

No hay comentarios: