sábado, 30 de agosto de 2008

La Torre Agbar (29-20 agosto 2008)


Ha sido una mañana de gran intensidad onírica, pero sólo consigo recordar un sueño. Me encuentro en una gran ciudad y subo a una colina, donde un amigo mío está dando vueltas en bicicleta. Cuando ya atardece, al llegar a un alto mirador, me detengo: a lo lejos, se ve la silueta de la Torre Agbar de Barcelona, enmarcada entre dos edificios modernos cuadrangulares. La imagen, teñida de luz malva, me cautiva.

Curiosidad: al día siguiente de este sueño he subido a la montaña de Sant Ramon de Sant Boi junto a mis amigos y he visto una imagen casi idéntica a la soñada: la Torre Agbar en el skyline de Barcelona, con la luz violácea del atardecer. ¿Premonitorio?

miércoles, 20 de agosto de 2008

Mi doble me eclipsa y experimentos lúcidos (19-20 agosto 2008)


Nuevo sueño lúcido. Sueño que me levanto de la cama, me coloco ante el espejo y, de nuevo, voy a buscar a mi Yo durmiente, que está en la habitación. Consigo levantarlo y llevarlo hasta el lavabo. Sin embargo, cuando nos ponemos ambos frente al espejo, el alter ego me eclipsa: sólo se refleja la cara del doble, mientras que mi rostro aparece de perfil y no consigo aprehenderlo.

Prosigo mi aventura lúcida, plenamente libre y consciente de que estoy soñando. Busco algún lugar cerrado, ya que una terapeuta -Consuelo Barea- me aconsejó provocar claustrofobia en los sueños para así poder superarla. Me dijo que cuando me encontrase en un túnel o prisión, evocara, por ejemplo, la ciudad de Florencia. Siguiendo su consejo, me meto en una especie de compartimento e intento transformarlo mentalmente en la ciudad italiana, pero no lo consigo, así que salgo de allí por mi propio pie.

Intento utilizar mi conciencia onírica para hacer otras cosas. Salgo volando por una ventana y asciendo al cielo para buscar alguna pista de Dios, pero tampoco esta vez tengo éxito.

martes, 19 de agosto de 2008

Peces se devoran en el palacio (17-18 agosto 2008)


Soñado durante las vacaciones en Sicilia (noche en Termini Imerese). Han construído un gran palacio ajardinado junto a mi casa, pared con pared. Observo desde una ventana y veo el recinto, de piedra marrón y pintado de colores, algo abigarrado y de estética parecida a La Alhambra. En uno de los patios hay una fuente llena de peces muy abotargados y pequeños tiburones. De repente los tiburones empiezan a atacar y devorar a los peces. Nos asustamos. Vamos rápidamente a contar lo que hemos visto. Al volver, ya han retirado todos los peces, quizá para evitar el siniestro espectáculo.

Mi doble, más alto que yo (15-16 agosto 2008)


Sueño durante unas vacaciones en Sicilia (noche en Siracusa). Tengo, de nuevo, un falso despertar: sueño que estoy en la habitación del hotel, me levanto de la cama y, como siempre, voy al lavabo a mirarme al espejo, donde mi rostro, esta vez, aparece sólo ligeramente deformado. Como también he experimentado con anterioridad, vuelvo a la cama para levantar a mi Yo durmiente. Intento dar la luz, pero el interruptor no funciona. Busco mi cuerpo a ciegas y finalmente noto el tacto de la perilla bajo los labios. Trato de levantar a mi cuerpo vegetativo, pero no se mueve lo más mínimo. Vuelvo al lavabo. Entonces viene Laura y trae consigo a mi doble. Intenta convencer al cuerpo perezoso: "Vamos, que quiere hacerse una foto contigo", le susurra. Para mi sorpresa, el alter ego es más alto que yo y tiene el pelo rizado. Nos colocamos ambos frente al espejo y consigo un reflejo perfecto, con un rostro nítido y amplio.

lunes, 11 de agosto de 2008

Secuestro en el coche (10-11 agosto 2008)


Último día de trabajo en COM Ràdio. Me voy acompañado de Laura A., una compañera de la emisora. Hablamos de las tareas que vamos a desempeñar durante la siguiente temporada, y, distraídamente, subimos a un taxi. Al pasar un rato, advierto que el vehículo nos está alejando más de la cuenta. Miro al conductor y al copiloto; son gentes intrigantes, parecen estar tramando un secuestro. Sin pensarlo dos veces, abro la puerta, me lanzo con el taxi en marcha y emplazo a Laura A. a hacer lo mismo. Nos escondemos en un supermercado. Nos creemos a salvo, pero los secuestradores asoman por el recinto, así que huyo a toda prisa junto a mi compañera.

sábado, 9 de agosto de 2008

Buscando mi cara (5 agosto 2008)


Me duermo en un viaje en tren a Oviedo y tengo un breve sueño lúcido. Es el siguiente: me levanto y entro en una casa con varias estancias. Me acerco a una de ellas; demasiado oscura. Entro a otra estancia, un baño iluminado donde, tal como esperaba, hay un espejo. Voy rápidamente a buscar mi reflejo -como suelo hacer en este tipo de sueños- y veo mis facciones ondulantes, como si hubiera un pequeño terremoto.

Eurocopa en Viena (4-5 agosto 2008)


Durante mis vacaciones en Santiago de Compostela, sueño que estoy durmiendo en un hotel de Viena. Es la última noche que pasamos en la capital austriaca y debemos madrugar mucho. Llegada la hora, nos levantamos y, antes de abandonar el hotel, miro por la ventana. Veo unas modernas carpas deportivas y estadios en un gran recinto rodeado de césped. Se parece a la villa olímpica de Munich y también a unas modernas instalaciones que hemos visto en una parte elevada de Santiago. Pienso que por el recinto vienés habrán pasado los futbolistas de la selección española durante la Eurocopa 2008, de donde salieron victoriosos.

Otros sueños recientes sobre la Eurocopa (julio 2008)
Otros sueños recientes sobre Viena (viaje en marzo de 2008)

sábado, 2 de agosto de 2008

Bullicio en la universidad y la montaña nevada (1-2 agosto 2008)


Día de verano nublado. Todo el mundo está de vacaciones o pensando en ellas. Incluso veo al rey Juan Carlos de Borbón en bañador, pasando por mi calle sobre un vehículo.

Voy a una librería y pido una cartulina blanca. Me indican hacia abajo. Hay que descender una rampa y pasar una puerta de cristal.

Sin embargo, por ese camino llego a la Universitat de Barcelona. Entro rápida y alegremente, como pez en el agua. Allí, entre el enjambre de jóvenes, veo a Pablo, derecho y con el pelo rizado, haciendo cola frente a un mostrador. Me saluda efusivamente y le explico mi intención de empezar una segunda carrera -Historia del Arte-. Pablo me anima a que curse una asignatura llamada "Lenguas germánicas", que incluye "inglés, alemán, francés y un poco de aragonés" (sic).

Después, en la misma universidad, veo a Mireia clonada. Primero aparece tras un cristal, sentada y sonriente; luego me llama desde algún otro sitio. Le muestro su imagen duplicada; al principio no da crédito del extraño fenómeno, luego queda perpleja.

Más tarde Andrés me recoge con su coche. Nos dirigimos a una zona de montaña junto a la ciudad, donde se avista niebla y nieve. Ya habíamos ido antes. Pido a Andrés que me deje en casa y vayan ellos de excursión si quieren. Él gira otra vez hacia la ciudad. Miro atrás: en el cielo nublado se divisan lejanos fuegos artificiales; también un gran cometa en forma de avión, que despliega una larga pancarta.