De nuevo un sueño marítimo. Viajamos en un vehículo por las tierras del Delta del Ebro. Avanzamos cada vez más pegados a la costa hasta que podemos tocar el agua fría con los dedos. Esta vez lo vivo con alborozo, frente al terror de otros sueños similares. Cuando llegamos al final de la línea costera, salgo volando del vehículo hasta conseguir una bella panorámica aérea del Taj Mahal. Tomo la cámara y fotografío el inmenso templo nacarado mientras pasa una bandada de pájaros. La instantánea no me convence, así que sigo volando hasta tener una vista del Taj Mahal en escorzo, con todas las cúpulas en batería. Vuelvo a tomar una foto.
Estos días ha vuelto de la India Agus Morales (Morgar), que me ha hablado de sus visitas al Taj Mahal.
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