miércoles, 21 de agosto de 2013

Laura con los lobos (mediados agosto 2013)

Ando por un camino de montaña junto a mi madre. De repente, oigo unos aullidos lejanos y me asusto. Lo olvido durante un rato hasta que se confirman mis temores: hay lobos merodeando por allí. Me vuelvo hacia atrás y los veo en el camino, a lo lejos, devorando aparentemente a un animal, con ruidos escalofriantes. Me horroriza pensar que nos puedan descubrir y se acerquen a nosotros. Mi sorpresa es mayor cuando me doy cuenta que Laura está al lado de los lobos, junto a algunos de mis hermanos y cuñados (todos hombres). Parecen fascinados por la escena salvaje, sin miedo. Me siento entonces algo rebajado y humillado por mi cobardía; mi miedo se mide entonces con la envidia de las sensaciones fuertes.

No hay comentarios: