Extraña pesadilla. Celebramos el convite de la boda de una de mis hermanas. De repente, mi abuela nos ordena que matemos a Franco (?) y su determinación homicida me escandaliza, como si de repente no la reconociera. Entonces decido huir corriendo, incapaz de aguantar la situación. El restaurante está en un lugar elevado de Barcelona, y debo bajar muchas escaleras y atravesar un parque de aspecto moderno y apacible, donde pasea una pareja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario