martes, 8 de mayo de 2007

Los caminos hacia la montaña (febrero 2005)

Estamos en un pueblo de montaña. Allí han instalado un estudio radiofónico al aire libre y me encargan conducir un programa para Ràdio Esplugues. No consigo hacerlo, porque no sé dónde he de conectar cada cable. Pido ayuda pero nadie me escucha. Poco después intento subir por una pendiente muy recta. En la cúspide hay una reja. A través de ella, se ve un paisaje sugerente: un templo luminoso, que evoca el Olimpo. No puedo traspasar la reja, porque está cerrada y electrificada. Todo aquel que sube se encuentra con el mismo obstáculo. Vuelvo a bajar y oigo la voz de un personajillo, parecido a un bufón o un enano. Dice algo como esto: “Tiene gracia que hagan un camino tan recto, si después ha de torcerse”. Tiene razón: el primer tramo de la subida es recto, pero después se transforma en un camino curvilíneo.

No hay comentarios: